Una disciplina positiva a través del arte

El arte como medio de expresión

El arte como medio de expresión es una herramienta fundamental en la disciplina positiva de los niños y niñas. A través de la expresión artística, los pequeños pueden desarrollar su creatividad, aprender a expresar sus emociones, pensamientos y vivencias de una manera única y personal y a conocerse a sí mismos.

En definitiva es una herramienta crucial para poder plasmar en una obra su visión del mundo y transmitir mensajes que de otra manera serían difíciles de comunicar. Un ejemplo de ello lo vimos en los diseños de los estudiantes del Colegio Lope de Vega, en como una idea simple fue plasmada con infinidad de detalles distintos según la persona, sus vivencias y motivaciones.

La disciplina positiva a través del arte

La disciplina positiva busca promover el desarrollo integral de los más pequeños, fomentando su autoestima, resiliencia y habilidades sociales. El arte es una herramienta perfecta para lograr estos objetivos, ya que les permite expresarse libremente, sin miedo a ser juzgados o criticados.

Los programas artísticos en las escuelas son fundamentales para garantizar que todos los estudiantes tengan acceso a estas oportunidades enriquecedoras. Implementar una disciplina positiva a través del arte requiere estrategias específicas que promuevan un ambiente seguro y colaborativo donde los estudiantes puedan explorar su creatividad.

Existen experiencias exitosas basadas en la metodología de la disciplina positiva que demuestran cómo el arte puede ser utilizado como una herramienta poderosa para generar cambios positivos en la sociedad. En conclusión, el arte tiene un poder transformador único y su influencia positiva se extiende más allá de los límites físicos o temporales, dejando una huella duradera en aquellos que lo experimentan bajo el marco de una disciplina positiva. A través del arte y la disciplina positiva los niños y niñas aprenden a observar el mundo desde diferentes perspectivas, a cuestionar lo establecido y a buscar soluciones creativas a los problemas que se les presentan.

La escolarización en Guinea Ecuatorial

Junto a Rusmila Okuale hemos podido conocer de primera mano las dificultades a las que se enfrentan muchas familias para poder escolarizar a sus hijos.
Además de la precaria situación de estas familias también somos conscientes de que la disparidad de género en la educación sigue siendo un desafío importante en Guinea Ecuatorial. Las niñas, en particular, se enfrentan a importantes obstáculos para acceder a la educación y desarrollar sus propios intereses y capacidades.

Abordar esta cuestión requiere un enfoque multifacético, que incluya proporcionar igualdad de acceso a la educación y la formación profesional para todos los géneros. Además, incorporar una pedagogía sensible al género en las escuelas puede ayudar a crear un entorno más inclusivo y de apoyo para todos los estudiantes. Al promover una disciplina positiva y una expresión artística, las escuelas pueden ayudar a romper con los estereotipos de género y promover la igualdad de oportunidades.

En la Pixavina somos conscientes de la importancia que tiene este tipo de educación para el desarrollo y crecimiento. La campaña navideña que se llevó a cabo las pasadas navidades junto a Rusmila Okuale fue el inicio de una bonita colaboración que en breves dará pasos importantes.

Queremos ayudar en la escolarización y el desarrollo educativo de aquellos donde la situación es mucho más precaria. Volamos a Guinea para dar soporte a Rusmila Okuale, fundadora del Colegio Plurilingüe Manantial en África, un colegio poco convencional donde se imparte una disciplina positiva y se respetan los derechos de los niños.

Pronto tendremos novedades de este bonito proyecto, donde apostamos por fomentar la creatividad y crear oportunidades educativas para todos los niños y niñas.